Para aquellos que han tenido la oportunidad de viajar a diferentes países del mundo, estarán de acuerdo con nosotros que ser mexicanos es cargar también con las peculiaridades que nos caracterizan.
1.- Por alguna extraña razón la comida sin picante, para nosotros, no es comida, por lo que te aventuras a la búsqueda de lugares en dónde poder adquirirlos.
2.- Si eres de aquellas personas que normalmente no gustan de la música de género banda, te sorprenderás ver que después de tiempo lejos de tu país estas curiosas melodías se convierten en el playlist de todas tus fiestas.
3.- Así como el picante en la comida, ver que en restaurantes «mexicanos» en el extranjero venden nada más y nada menos que burritos como platillo estrella, te hace arder la cabeza. No señores, Taco Bell no es la mejor opción si deseas comer algo mexicano.
4.- Por naturaleza los mexicanos somos muy efusivos, cariñosos, atentos y hasta amorosos, por lo tanto, cuando saludas a alguien con un abrazo o beso, puede ser un gesto extraño para la otra persona.
5.- Las porras se convierten en un himno cada fin de semana o cada que haya partidos de algún deporte. No por nada ya hasta nos han copiado en nuestros versos.
6.- Los cambios tan drásticos de clima pueden ser un factor hasta de depresión para nosotros. La vida es cruel cuando al dormir con todo y calcetines de deditos el frío te sigue fastidiando el sueño.
7.- Ser hermosamente cotizados en el extranjero, especialmente en países europeos, donde nuestro carisma y calidez fluyen y enamoran a todos los transeúntes. 😝
8.- Las tortillas se convierten en el objeto más preciado de toda tu existencia, sobre todo cuando en muy pocas partes las puedes conseguir o cuando su precio es como el de las perlas de oro.
9.- El 16 de Septiembre es la fiesta en donde sales a festejar porque sales, aún y cuando en México detestes esa fecha por todo lo que ya sabemos.
10.- Ser amigueros está en nuestro ADN, por lo tanto tus fiestas son pequeñas reuniones de no menos de 15 personas.
11.- La Salsa Valentina y el chile Tajín se convierte en el segundo alimento indispensable para tu alacena. Es divertido ver que para los extranjeros nosotros comemos chile con todo, y lo genial de esto, es que no te preocupas por compartir puesto que ellos no comen nada de picante.
12.- Beber cerveza es el jugo de nuestra vida, especialmente cuando le ponemos sus menjurjes como chile, limón y sal para saborearla más.
13.- Somos muy confianzudos al igual que amigueros y como por arte de magia todos se convierten en nuestros amigos y para todos ellos «nuestra casa es su casa».
14.- ¿Albúr? ¿Dónde? Nosotros no conocemos ese término, qué va.
15.- Sorprendernos porque la cocina es también el cuarto de lavado. Eso de administrar espacio los extranjeros lo saben hacer muy bien.
16.- Si por alguna razón te encuentras un mariachi en algún lugar, en ese mismo momento te conviertes en Alejandro Fernández versión 16.
17.- Aprender groserías en otros idiomas es nuestro fuerte y a todos nuestros amigos de nacionalidades diferentes les inculcamos la cultura del «Chin***** tu madre».
18.- Quedarnos con cara de «what?» Cuando escuchas a alguien hablar y no le entiendes nada y ese alguien también habla español.
19.- Esto es triste pero cierto, somos mundialmente conocidos como los impuntuales. Por eso si piensas hacer una reunión aclárales que podrías llegar entre las tales a tales horas.
20.- Si es tu cumple y no te regalan nada, no te ofendas, no todos son tan chéveres y detallistas como nosotros.
21.- El Cielito Lindo es el himno representativo de nuestro país y lo cantas con el mayor entusiasmo que se pueda tener.
22.- Si en tu maleta olvidaste la bandera nacional, no te preocupas y la mandas a pedir. ¡Todo mundo debe tener su bandera para ocasiones especiales!
23.- El «itacate» para el camino o mejor conocido como «lonche», es algo que se convierte en primordial, sobre todo cuando el trayecto es largo.
24.- Leer mapas se convierte en tu hobby del día a día, sobre todo cuando eres nuevo en el lugar.
25.- Somos los organizadores de todas las fiestas por derecho divino.
26.- Cuando no entiendes un idioma y necesitas ir a un lugar, los letreros son jeroglíficos sin descifrar, el viento al dedo es el mejor guía.
27.- Las primeras semanas son tristísimas porque extrañas a las familias, después te adaptas a la perfección con tu libertad y tus propias responsabilidades y ahora no te imaginas a lado de tu familia.
28.- Nos damos cuenta de lo pudorosos que llegamos a ser a comparación de otras personas, y es que ¿cómo me van a ver en calzones? No!
29.- Afortunadamente viajar te ayuda a conocer de otros países, pero desafortunadamente nos damos cuenta que de nuestra cultura sabemos muy poco.
30.- Cuando regresas al país y dejas todo allá, te percatas de lo maravillosa que fue esa aventura y en la mayoría de las veces te dices a ti mismo que pudiste haber aprovechado mejor el momento.
Como consejo: viajen, vivan y disfruten, pero sobre todo, aprendan y jamás olviden.